Por errores de dedo se eliminaron dos entradas de Expresando lo inefable, que corresponden a la relación música y cine. Aquí dejo las dos eliminadas y la última para cerrar con un broche de oro que huele y sabe muy bien (mmm).3.- Cucurrucucu Paloma (Caetano Veloso) Happy Together. Won Kar Wai.
Una toma aérea y móvil de las cataratas del Iguazú acompasa la canción. Las cataratas, el símbolo de vida y de la imposibilidad de realización de la pareja protagonista pues uno de sus deseos era ver juntos las cataratas, lo cual jamás sucede. La toma gira en torno a las impresionantes caídas de agua para al final quedar en un “silencio” azul. La escena es muy poderosa, la piel se me enchina cada vez que la vuelvo a contemplar, y me quedo fascinado una vez más ante la unión sagrada entre las imágenes y la música. Endemoniadamente conmovedora.
"Dicen que por las noches nomás se le iba en puro llorar, dicen que no comía, nomás se le iba en puro tomar, juran que el mismo cielo se estremecía al oír su llanto…”
4.- Dile a tus ojos (Guty Cárdenas) Sombras en el Paraíso. Aki Kaurismäki.
Es curioso encontrar una canción mexicana en una minimalista película de Finlandia, pero es algo recurrente en el trayecto fílmico de Kaurismäki. En la escena aparece Ilona en la penumbra del caótico departamento de Nikander, disponiéndose a tocar un LP en el tocadiscos, y justamente ahí comienza a sonar la canción con la sentimental voz de Guty Cárdenas, mientras se presencia la golpiza de la que es víctima Nikander. A pesar del fabuloso soundtrack, está canción sobresale de todas las demás, pues quien entiende español puede sentir en un instante todo el poder de la letra que encaja con la situación amorosa de los personajes. Encantador el hecho de incluir una composición del yucateco en la primera parte de la trilogía del proletariado.
“Dile a tus ojos que no me miren, porque al mirarme me hacen sufrir, que no me miren, porque me hieren, diles que tengan piedad de mi…”
5.- How much is that doggie in the window (Patti Page) Pink Flamingos. John Waters.
En Pink Flamingos todas las canciones encajan perfectamente en las situaciones guarras, vomitivas y desparpajadas. Qué mejor canción para acompañar la famosa escena de Divine degustando caca de perro, para recibir triunfante el título de la persona (también la actriz) viva más guarra del mundo. Comienza la música, vemos a Divine saborearse su bocado, para después ver una de las escenas más puercas jamás filmadas; a mi en el fondo me causó risa y algo de incomodidad, sí fuera coprofílico hubiera tenido múltiples orgasmos. Una naturaleza que desafía toda descripción, así es Pink Flamingos. Recomendable para este tiempo de cuaresma.
"How much is that doggie in the window? The one with the waggly tail, I do hope that doggie is for sale..."